lunes, 13 de agosto de 2018

El jovencito Frankenstein


                        El jovencito Frankenstein  (1974)


               



Día 34...
No hay mejor forma de dar la bienvenida a una nueva semana que con una de las mejores comedias de la historia del cine.
Mel Brooks representa uno de los mejores ejemplos de esos comediantes judíos que han destacado a lo largo de la historia del humor, (y mira que los pobres han tenido una historia bien triste) siempre dispuesto a cruzar el límite con tal de hacer reir.



                      Mel Brooks: cineasta capaz de lo mejor....y de lo peor también


Y su caso es bien particular pues este guionista, actor y director estadounidense de origen ruso se ha demostrado capaz de lo mejor y de lo peor a lo largo de su carrera, alternando gags y diálogos a cual más ingenioso, merecedores de catalogarse entre las cimas más altas del humor, con otros ciertamente deleznables basados en lo soez, lo escatológico y lo sexual (vamos, el clásico "caca, culo, pedo, pis" que se puso de moda en comedias más recientes)








                 Las dos caras de Brooks: del humor más sutil al humor de trazo grueso



Aquí solo nos quedaremos con lo bueno, que en su caso, es mucho.
Sus primeros pasos como cómico los dio sirviendo en el ejército durante la II Guerra Mundial, parodiando en la radio los mensajes de propaganda nazi. Ya licenciado, volvió a casa y comenzó su carrera profesional escribiendo y produciendo para la televisión, siendo su mayor éxito "Superagente 86", exitosísima parodia de las películas de espías a lo James Bond (sí, Mel Brooks es el padre de Maxwell Smart)



                              Superagente 86: otra creación genial de Mel Brooks



De ahí, al cine, entrando por la puerta grande con "Los productores", Oscar al Mejor Guión en 1969, que también se convirtió en el musical más premiado (12 Premios Tony) cuando dio el salto a Broadway décadas después.



              Por si fuera poco, creador de uno de los musicales más famosos del mundo

Entre otras muchas más, estrenó "La loca historia del mundo", "Máxima ansiedad", "Sillas de montar calientes", "Soy o no soy" y para mí, su mejor película, la que hoy nos ocupa, "El jovencito Frankenstein" (perdón, Fronkonstin)
Me quedo con ésta, porque a pesar de que como el resto de su filmografía, presenta grandes aciertos y grandes defectos, pesan más los primeros que los segundos y es su obra más redonda, siendo nominada al mejor guión ese año.
Pensada como parodia-homenaje de los clásicos de terror de la Universal de los 30 (de ahí su impecable blanco y negro pese a ser de 1974) incluye escenas míticas como la del personaje ciego de Gene Hackman, la del "casi muerto" y el primer encontronazo del doctor en el andén con Igor (perdón, Aigor) de un genial Marty "la mirada más penetrante del cine" Feldman, que podréis encontrar más abajo.



                            Marty Feldman: el gran descubrimiento y robaescenas del film


Por último, reseñar el importante papel también que ha ejercido Brooks como productor de cine más serio, en películas tan importantes como "El hombre elefante" o el remake de "La mosca", lo que tuvo que hacer bajo pseudónimo para que el público no las confundiera con comedias.
A disfrutar con el doctor Fronkonstin y el bueno de Aigor...








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